El responsable de exposiciones, Juan Carlos Moya (que gran tipo, que agradable, simpático y colaborador), me vuelve a felicitar por mi trabajo y me repite que le ha encantado. ¿Me tomé las 5 pastillas de quimio de la mañana? Ah, sí, pero no me he tomado las 2 de mercaptopurina que he de tomar entre comidas ... ummmm .... voy a buscarlas al pastillero.
Además Juan Carlos me dice que ha mostrado mis fotografías a fotógrafos de primer nivel (Mellado, Díaz-Maroto, Ángel Marcos, ...) y que han sido unánimes en alabar mi trabajo, sobre todo las últimas fotografías que no son abstractas. No sé si comeré hoy, con este revuelto de estómago que tengo, pero ¿dónde está mi pastillero?
Me despido de Juan Carlos, me insiste: mueve tus fotografías, son muy buenas. Cuando tengas más pásate por aquí que las quiero ver. Ah, mira, allí está el pastillero .... pero si está ya vacío otra vez, ¿tendrá un agujero?. Total, si hoy sólo tengo que tomar 20 pastillas. Lo rellenaré otra vez.
En fin, que me vuelvo a casa con las fotografías debajo del brazo y una palmadita en la espalda, ¿y ahora qué?
Maldito pastillero, lo acabo de llenar y ya le faltan pastillas. Y los botes y cajas vacíos, ¿y ahora qué?
A seguir haciendo fotos, presentarlas no sé dónde, pedir cita para el médico para que me haga recetas, comprar más botes y cajas con las pastillas, y comprarme otro pastillero sin agujero, pero no sé dónde.
Cómo me duele la espalda del golpecito.
Cómo me duele el estómago del pastillero maldito.
Más fotografía conceptual de la serie "Desechos de tienta".
3 comentarios:
A unos Mellado les alaba el trabajo y a otros nos vende el libro, aunque sepamos que ni con el libro haremos nada de provecho...
No me hacía falta que dijera Mellado lo bueno que es tu trabajo, llevo mucho tiempo disfrutando de tu creatividad, sensibilidad y dominio de la técnica para plasmar ambas en una fotografía que siempre me toca la fibra; pero siempre es buena esa palmadita Jose Luis, porque de alguna manera te reafirma en que estás en el buen camino y que poco a poco te irás haciendo un nombre, que nunca viene mal.
Las pastillas, chico, qué te puedo decir a estas alturas, que para atrás ni para tomar impulso como decía Fidel, que sólo tienes que mirar adelante y que tarde o temprano el pastillero se caerá en un recodo del camino y quedará állí olvidado. De momento es un peso que debes llevar, pero al mismo tiempo es el peso que te permite seguir disfrutando de tus pasiónes, así que tápale el agujero y aguanta su peso, que ahora mismo vale su peso en oro...
un fuerte abrazo
Ya te dije que los pescadores me gustaban, y mejor en el formato de Fuenla que el de la Alliance.
El pastillero, pues un escalón más que has de subir y superar para llegar arriba.
JLS
Poco a poco se ira conociendo tu arte y reconociendo que es lo más importante. A propósito de pastillero mañana salgo de viaje y tengo que preparar el mío.
Un abrazo.
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