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lunes, 7 de junio de 2010

Recuerdos de Micaela

Mañana hará ya un año que El rincón de Micaela quedó vacío y en silencio.

Cuando uno vuelve la vista atrás y comprueba el inexorable paso del tiempo, se agolpan los recuerdos en la mente y se mezclan como las rizadas cintas de espuma que en la orilla del mar nos dejan póstumas las olas. Ya hace un año, parece que fue ayer, pero ha pasado tanto.

Un año te quita, te trae, te aleja, te acerca ... en un año puedes perder aquello que más has querido en la vida, o te puede traer de vuelta aquello que perdiste sin esperanza de volverlo a recuperar. La vida te empuja, te arrastra, te atrapa, se embosca y te mata. Hay que disfrutarla, amigo, que cualquier día se escapa.


Hoy hace un año que el rincón de Micaela quedó vacío y mudo.

Hoy, como hace un año, me quedo meditando acompañado solo del silencio, en la penumbra de mi cuarto, con una lágrima que asoma y la vida, allí afuera, esperando. Me quedo pensando en esos rincones que se quedaron vacíos, en el pañuelito empapado en lágrimas de Micaela, en su ya frío regazo.

Cómo pasa la vida, abuela, cómo nos va matando.



4 comentarios:

Anónimo dijo...

Seguro que si hay algo mas alla se sentirá orgullosa y feliz por tus sentimientos, y si no hay nada igualmente orgullosos de ver los bellos sentimientos que tienes y el recuerdo que perdura en ti de los seres queridos

Un besito
maribel

J. Lopez dijo...

Cierto, muy cierto. Hay que aprovechar el momento porque, de repente, ya no puedes.

JLS

Anónimo dijo...

En el año 2009 perdimos mucho, perdimos lo mas importante: a seres queridos (ya sean perdidas en vida o en muerte). Pero los sentimientos compartidos en vida son lo importante, porque una vez muertos, ya nada importa. Los hechos se demuestran en vida; siempre.Lo demás todo se convierte en abono para la madre naturaleza.
Un año sin ti, Micaela. Un año menos de vida para mi. Asi es la vida, y la muerte, es parte de ella.

Besos artista.

Crispi

Eluge dijo...

Hasta el objetivo de tu cámara parece tener lagrimas o al menos esa sensación es la que me produce tu foto cuando miramos con los ojos humedos, la luz inunda la soledad de la estancia.
Un abrazo.