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viernes, 22 de enero de 2010

Jabugo y Don Eugenio, una mirada pictorialista, la maldita RENFE y las penas de amor

Hoy volvía en el tren después de impartir la primera clase del Curso de fotografía que estoy empezando. La vocación docente no es nueva en mi. La fotografía y la pasión que en mi despierta me han motivado a preparar e impartir este curso. Y no debo de engañarme, la necesidad de obtener algún ingreso para paliar la penuria económica que se me avecina.

Como digo, regresaba a casa hambriento y cansado. Y claro, hay que usar el transporte público que es barato y ecológico: cuando no se "averían" las catenarias, te vomitan en una estación y te anuncian por megafonía que se interrumpe el servicio, así porque sí, y vuélvete a casa como puedas. QUE IMPRESENTABLES.

Así, he tenido más tiempo para leer. Un artículo de Rosa Montero me ha llamado la atención hablando sobre el amor en la vejez. En él citaba al escritor Alejandro Gándara y la ridiculez que la pasión despierta, vista desde fuera. Comparaba las penas de amor con el marearse en un barco: tú te sientes morir, pero a los demás les produces risa. Esta visión grotesca que ridiculiza tal vez los sin sentidos amorosos de la pubertad y la vejez, desde la visión que me ofrece mi madurez y mi experiencia personal me ha producido una gran nausea. Un completo desacuerdo.

No conozco, por más pueril y vana que sea, pena de amor que me pueda producir risa. Más al contrario, me produce una tremenda tristeza y desolación. No hay dolor más terrible que cuando el corazón se rompe hecho añicos, cuando la indiferencia te cubre de luto y el desamor te desangra el alma.

No, señor Gándara, una pena de amor no es un mareo en un barco. Una pena de amor es un naúgrafo sin barca, una nausea del alma, el más terrible de los desiertos y la cadena perpetua de la esperanza. Si le produce risa es que nunca jamás le han destrozado el corazón. Y si nunca le han destrozado el corazón, señor Gándara, usted no ha vivido.

Fotografía: plato de jabugo y vino Don Eugenio, regalo de mis grandes y entrañables amigos Cinta y Eugenio. Técnica pictorialista, sin Photoshop: luz natural de un ventanal, bodegón reflejado en cristal con fondo pintado en gris, que da ese aspecto mortecino a los colores y un pequeño toque "flu". Fotografía descartada para mi próxima exposición, pero un interesante experimento que me abre nuevas vías para explorar.



1 comentario:

Anónimo dijo...

La neurobiología diferencia tres procesos cerebrales distintos en el amor, interconectados y regulados hormonalmente:
· El impulso sexual indiscriminado o grado de excitación sexual para la búsqueda de pareja, regulado por la testosterona y detectable neurológicamente en el córtex cingulado anterior; de breve duración.
· La atracción sexual selectiva, pasión amorosa o enamoramiento; regulada por la dopamina en los circuitos cerebrales del placer; inusualmente prolongado frente a otras especies (hasta 18 meses).
· El cariño o apego, lazo afectivo de larga duración que permite la continuidad del vínculo entre la pareja, regulado por la oxitocina y la vasopresina, que también afectan al circuito cerebral del placer; su duración es indeterminada (puede prolongarse toda la vida).
Aparte de la serotonina y la oxitocina, el cerebro libera otra sustancia en estado de enamoramiento, la feniletilamina que actúa sobre el sistema límbico y provoca las sensaciones y sentimientos comunes en el enamoramiento, además de que es un precursor de la dopamina, de ahí que también se encuentre en grandes cantidades. Se puede encontrar en alimentos como el chocolate y quesos fermentados. Una pequeña modificación química puede hacer que se transforme en un estimulante (anfetamina y metilfenidato) o un antidepresivo (bupropión y la venlafaxina).
Los modelos biológicos del sexo tienden a ver el amor como un impulso de los mamíferos, tal como el hambre o la sed.23 Helen Fisher, una experta mundial en este tema, divide la experiencia del amor en tres etapas parcialmente superpuestas: lujuria, atracción, y apego. La lujuria expone a las personas hacia el resto; la atracción romántica anima a las personas a enfocar su energía en el apareamiento; y el apego implica la tolerancia de la pareja (o de los hijos) durante un tiempo suficiente como para criar a la prole hasta que ésta pueda valerse por sí misma.
La lujuria es el deseo sexual pasional inicial que promueve el apareamiento, e implica un aumento en la liberación de sustancias químicas tales como la testosterona y el estrógeno. Estos efectos raramente duran más de unas pocas semanas o meses. La atracción interpersonal es un deseo más individualizado y romántico por un candidato específico para el apareamiento, que se desarrolla de forma independiente a la lujuria como un sentimiento de responsabilidad hacia la pareja. Recientes estudios en neurociencia han indicado que, a medida que las personas se enamoran, el cerebro secreta en crecientes cantidades una serie de sustancias químicas, incluyendo feromonas, dopamina, norepinefrina y serotonina, que actúan de forma similar a las anfetaminas, estimulando el centro del placer del cerebro y llevando a efectos colaterales tales como aumento del ritmo cardíaco, pérdida de apetito y sueño, y una intensa sensación de excitación. Las investigaciones han indicado que esta etapa generalmente termina al cabo de un año y medio a tres años.24
Ya que las etapas de lujuria y atracción se consideran ambas temporales, es necesaria una tercera etapa para establecer relaciones a largo plazo. El apego es el vínculo que promueve relaciones que duran muchos años o incluso décadas. Se basa generalmente en responsabilidades tales como el matrimonio y los hijos, o en amistad mutua basada en aspectos como los intereses compartidos. Se ha relacionado con niveles de las sustancias químicas oxitocina y vasopresina a un nivel mayor del que se presenta en relaciones a corto plazo.24
La molécula proteínica conocida como factor de crecimiento nervioso (NGF) presenta niveles elevados cuando las personas se enamoran por primera vez, aunque ésta vuelve a sus niveles previos al cabo de un año.25

http://es.wikipedia.org/wiki/Amor